La remodelación de la estructura de formación permanente del profesorado de enseñanzas no universitarias, es un mero recorte que, bajo la apariencia de una innovación organizativa y técnica, esconde la intención de seguir podando a toda costa, al tiempo que acaba con esta imprescindible red de formación sin aportar nada nuevo.
La formación permanente del profesorado contaba con 33 centros de profesores distribuidos por toda la Región y cerca de 400 asesores. Desde UPyD se ha considerado que esta red debía ser modificada al estar sobredimensionada, pero había demostrado su capacidad y eficiencia, por lo que su desaparición no es lo más conveniente, máxime en momentos de fuerte crisis como el que vivimos.
La Consejería de Educación ha justificado el cambio a partir de acciones innovadoras que, en realidad, no lo son:
- Un plan de formación centralizado que, sin embargo, ya se elaboraba anualmente (Plan Regional de Formación).
- Unidades de formación provinciales; con las que ya se contaba en las unidades de programas educativos de las respectivas delegaciones.
- Coordinadores de formación en los centros educativos; los cuales ya se designaban para coordinar dicho centro educativo con el Centro de Profesores respectivo.
- Formación “on line” a partir de la utilización de internet. Esta modalidad formativa se desarrollaba desde los Centros de Profesores desde hace años y constituía un alto porcentaje de las diferentes actividades de formación.
Por tanto, la única novedad es la reducción de asesores a una treintena. Treinta asesores para una de las comunidades más extensas de España, con 1.500 centros y 36.000 profesores, perdiéndose prácticamente la posibilidad de contar en los centros educativos con el asesoramiento y control directo por parte de expertos de formación, lo cual perjudicará especialmente al profesorado de zonas rurales, a centros con puestos de difícil desempeño y disminuirá notablemente el trabajo en grupo y mediante seminarios en los propios centros.
El decreto por el que se suprimen los anteriores centros de profesores y se crea un único Centro Regional para la formación permanente trae consigo la desaparición de 400 empleos, 33 centros con un alto nivel tecnológico y una estructura consolidada y cercana al profesorado, para ser sustituida por una formación virtual que no se acaba de definir ni concretar en contenidos y metodología, y que ha paralizado y puesto en punto muerto desde hace seis meses las acciones formativas del profesorado,.
En épocas de crisis es la Educación la que debe ser más favorecida y nunca recortada, dado que es el motor del avance de la sociedad y, sin embargo, es el sector en el que se han aplicado mayores medidas de austeridad y sobre el que se han cebado con mayor énfasis los recortes de la Presidenta Cospedal.
