Las cifras del desempleo en el primer trimestre de 2011 que cifran en 216.100 las personas desempleadas, constituyen una nueva muestra de la política errática tanto del Gobierno de la Nación como del Gobierno de Castilla La Mancha.
Durante 30 años, los sucesivos Gobiernos del PSOE han desarrollado políticas económicas sin visión de futuro, dependientes de factores externos y permitido el desarrollo de un tejido productivo basado en la subvención y en la improvisación, con una Administración mastodóntica y basada en el favoritismo que ha puesto al sistema al borde de la ruina.
La exigencia del Sr. Barreda al Gobierno de España de 400 millones correspondientes al sistema de financiación autonómico no son sino maniobras distractivas y desesperadas que, de conseguirse, no paliarían ni en un 7% el inmenso déficit que sufrimos y, por otra parte, que difícilmente concuerdan con el mantenimiento por su parte del pozo sin fondo que suponen las muchas empresas públicas de la Junta de Comunidades, refugio de ex altos cargos y beneficiados del régimen, con el inútil aeropuerto de Ciudad Real a su cabeza.
La nueva legislatura que se abrirá el próximo 23 de mayo debe responder a las necesidades de CLM y no a las de los partidos y, partir de una exigente planificación económica y social a largo plazo, que cuente con un liderazgo regional sólido y una oposición leal, cesando las eternas improvisaciones. UPyD tiende la mano y ofrece su colaboración para ello sin comprometerse a pactos de gobierno, sino desde el análisis de cada propuesta y siempre en benficio de la Comunidad, para lo cual ya ha anunciado un decálogo de medidas que deben ser tomadas a la mayor brevedad posible.
